17.11.08

Aventuras en ADSL

Saliéndome un poco de los temas habituales de este blog voy a contaros una divertida anécdota que tiene como protagonista a mi línea de ADSL. Érase que se era una conexión ADSL que llevaba funcionando bien como tres años (más o menos, no me voy a poner a mirar la fecha del contrato). De repente (el sábado por la tarde, para ser exactos) el sicronismo de la línea empieza a ir y venir como doncella indecisa frente a galán de buen porte pero mala fama. Cosa curiosa, y aquí viene la anécdota, cada vez que llamo al servicio técnico el problema se soluciona, vuelve el sincronismo y recupero la conexión. ¿Brujas? ¿Duendes de la línea?
Mientras, ya esta tarde, intentaba decidirme entre llamar a Mulder o a Iker, me doy cuenta (sagaz que es uno) de que no recupero el sincronismo sólo cuando llamo al servicio técnico, sino siempre que descuelgo el teléfono para llamar. Diré en mi descargo que casi no llamo por teléfono, de ahí que tardara en apercibirme del tema. Otra cosa llama mi atención, un persistente ruido en la línea que desaparece cuando salta el contestador o me cogen el teléfono. ¿Conclusión? Parece que tengo problema de ruido en la línea que por alguna razón exótica desaparece al descolgar el teléfono. Ahora falta saber si esto lo arreglará telefónica o el tiempo inexorable pero, de momento, quizás os resulte divertido imaginar a vuestro viejo amigo Marcos descolgando el teléfono sin intención de llamar a nadie cada vez que pierde la conexión a internet. Cosas veredes, amigo Sancho...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

juas juas. Rézale a la virgen de fátima a ver si consigues que vengan de nuevo los tres niños o cuántos cojones fueran a echarle un vistazo a tu línea. Porque eso va a ser más sencillo que el que se desplace un técnico de telefónica a mirarte el problema.

P.D. Yo en tu lugar preferiría que viniese Scully.

P.D.2 Aunque si se persona la virgen de fátima, también tendría su morbo.

Marcos dijo...

Me plantee lo de Scully pero si hubiera puesto como opciones a Scully o a Iker la respuesta hubiera resultado demasiado obvia.