Anoche tachamos de la lista uno de los nombres míticos que nos quedaban por ver sobre un escenario, el de REM (nos sigue quedando Bowie, no nos olvidamos). A la plaza de toros de Las Ventas, no demasiado puntuales, salieron los tres miembros de la banda apoyados por un batería y un segundo guitarra (Scott McCaughey) para dar un concierto de unas dos horas lleno de canciones clásicas y algunas de las nuevas. Para los curiosos, he encontrado una lista de los temas que tocaron y que aquí os dejo:
- Living Well Is the Best Revenge
- What's the Frequency, Kenneth?
- Drive
- Circus Envy
- Animal
- Man-Sized Wreath
- Ignoreland
- Just A Touch
- Strange Currencies
- Hollow Man
- These Days
- Walk Unafraid
- The Great Beyond
- Staring Down The Barrel
- One I Love
- She Just Wants To Be
- I’ve Been High
- Let Me In (¡gran versión acústica!)
- Horse To Water
- Bad Day
- Imitation Of Life
- Orange Crush
- Supernatural Superserious
- Losing My Religion
- Accelerate
- It's the End of the World As We Know It (And I Feel Fine)
- Man On The Moon
- I Wanna Be Your Dog
El fondo del escenario, lleno de pantallas situadas a distintas profundidades, formaba una especie de collage visual en el que se superponían imágenes del concierto con montajes en vídeo preparados para la ocasión y que variaban tema a tema. Si queréis haceros una idea, en la página de REM están colgadas muchísimas fotos y vídeos de los conciertos de esta gira.
Pero el verdadero espectáculo estaba en los que tocaban, especialmente en Michael Stipe, que no paró de gesticular, bailar y dirigirse al público durante todo el concierto, incluyendo varios paseos junto al público, faceta en la que le imitó Mike Mills casi al final.
Ya acabando el concierto sacaron como apoyo a los teloneros, We are Scientists (de cuya actuación sólo vimos el final así que no voy a opinar) y, sorprendentemente, decidieron acabar el concierto con "I wanna be your dog", el clásico de Iggy Pop. El caso es que este último tema lo tocaron con menos intensidad que los inmediatamente anteriores y el público dió la impresión de estar un poco descolocado con la elección del tema, así que el final perdió parte de su potencia "catárquica".
Como decía al principio, otro nombre tachado de la lista que además nos deja un estupendo sabor de boca. Si es que cuando uno suena así en el 84...
... tiene su lógica que siga siendo un espectáculo digno de verse catorce años después.
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