29.8.08

Una casa en Lisboa

Revisando las fotos que tengo en el disco duro me he encontrado con esta de un edificio en Lisboa, cerca de la plaza del Marqués de Pombal, una de las principales de la ciudad. Estuve en la recomendable capital portuguesa el pasado otoño y aunque tengo cierta tendencia a tirar fotos a todo lo que puedo cuando estoy en modo turista, esta tenía su razón de ser.
Hace muchos, muchos años, mi madre, junto a mi tía y mis abuelos, vivieron aquí una temporada mientras mi abuelo trabajaba en la construcción de un hotel. Mi madre recordaba la dirección (lo que me hace preguntarme de dónde he sacado yo esta falta de memoria) y, ni corto ni perezoso, más que otra cosa porque estaba a menos de trescientos metros de mi hotel, me encaminé a comprobar si el edificio seguía en pie. Y ahí estaba, no en muy buen estado, rodeado de vallas, pero aún en pie, un trocito de historia familiar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La memoria familiar nos sirve para conocer de dónde venimos. La memoria personal nos sirve para saber a dónde queremos ir. Lo primero es recuperable, lo segundo se pierde o no se ha tenido nunca. En mi caso prefiero no pronunciarme.