Summercase 2008: Día dos

Para el sábado sí que tenía más claras las prioridades, iba a vivir en el escenario grande de forma prácticamente constante. Llegamos justo a tiempo de ver el concierto de Grinderman (alias Nick Cave con dos terceras partes de los Bad Seeds). En su línea habitual, excéntrico, casi histriónico a veces (y muy acompañado en eso por su guitarrista, al que tenían que “reparar” constantemente un platillo al que golpeaba con una maraca como si le hubiera hecho algo) y dando un espectáculo digno de verse y escucharse de rock sucio tocado como pocos saben. El australiano nos dejó una de las dedicatorias más directas a un miembro del público que he escuchado nunca cuando una señorita le gritó el clásico “I love you” y él le contesto señalándola, “I love you too. You, the one with the glasses and the hair…” mientras hacia un gesto que debía querer representar el flequillo de la implicada.
Pequeña pausa para cenar mientras escuchábamos a lo lejos lo que parecía estar siendo un buen concierto de Blondie y de vuelta al escenario grande para ver a Interpol. Y aquí se nos acaban las estrellitas para ponerle a este grupo neoyorquino que nos dejó el mejor sonido del festival mientras desgranaba las mejores canciones de sus discos. Todo sonó perfecto, las voces, cada guitarra, cada nota del bajo… otro grupo con mucho carácter encima del escenario con el que uno se queda con la sensación de haber rentabilizado cada euro que se ha gastado en la entrada y más.
Otra pausa (un poco excesivos los tiempos entre concierto y concierto, con ratos en los que los dos escenarios más grandes se quedaban sin actividad) y a por el siguiente concierto, The Verve. No soy muy fan del grupo, tengo muy poco oídos sus discos y tengo que decir que la pose del cantante me saca un poco de mis casillas pero el concierto fue muy bueno, centrados en dar al público lo que quería y con muy buen sonido (fue la norma general, al menos en este escenario, todo el sábado). Con sus momentos “himno” muy bien estudiados lo cierto es que gana mucho frente a las actuaciones de Ashcroft en solitario. Pese a mis dudas iniciales, mereció la pena.
Y el fin de fiesta, tras unos breves minutos para Etienne de Crécy, llegó con Primal Scream. Uno podía temerse que a esas horas (pasadas las dos y media) lo mismo los miembros del grupo llevaban demasiado tiempo en el backstage para dar un buen concierto pero no fue así. Centraron bastante el repertorio en los discos más “sureños”, que no son mis preferidos aunque es innegable que ayudan mucho a convertir el concierto en una fiesta con todas las letras. Aún así incluyeron algunos temas de sus fases más “electrónicas” como “Shoot Speed, Kill Light”, para mi la mejor canción que tienen y que tocan siempre, por algo será. Si no recuerdo mal, se saltaron completamente el “Screamadelica” aunque con una hora por delante y tanto repertorio, por algo hay que cortar. Pudo ser mejor, pero fue un gran final para los conciertos de este Summercase.
No llegamos a tiempo de ver a 2manydjs y el resto del festival lo pasamos un una carpa hasta que fuimos expulsados a la temprana hora de las cinco y media de la mañana entre gritos de “el año que viene nos vamos al FIB” después de que cortaran la música. Por cierto que no pudimos recuperar el euro de nuestro vaso porque cerraron las barras al mismo tiempo. Unos cuantos euros más para la organización.
En resumen, dos días con alguna sorpresa y muy buenos conciertos. No nos tuvimos que acordar mucho del FIB ni del Saturday Night Fiber. Buena señal.